Fin del primer curso de Japonés. Hicimos como si hubiéramos aprendido algo. Y lo simulamos bastante bien. La profesora escribió una obrita que nosotros leímos sin saber del todo lo que estábamos diciendo. Se trató de una adaptación muy adaptada del cuento tradicional japonés Kazajizou.
Aparte de la obra, cada uno de los alumnos habló y contó algunas cosas de sus vidas. Eso último sí fue escrito por nosotros.
Acá la obra completa, con su protagónica pareja:
La historia es así: Melina tiene hambre y quiere que yo cocine. Yo le digo que no tenemos plata ni comida. Justo en ese momento llega un visitante que pide alojamiento y también comida (interpretado por nuestro compañero Johannes Schmude, más conocido como "shumudo" por cómo se pronuncia su apellido acá). Melina me manda a vender su sombrero para comprar comida. En el camino me encuentro con dos ojizousama, o seguidores de buda, que tienen mucho frío. Entonces yo les dejo el sombrero que iba a vender, primero a uno y después a la otra, sin saber cómo eso les puede ayudar contra el frío. También les dejo mi bastón. Vuelvo a casa sin el pan y sin la torta, pero Melina me felicita por mi buena acción (esta es la parte más ficcional si consideramos quién es la actriz). A pesar de todo, y en agradecimiento de mi acción de caridad, los ojizousamas llegan a la casa con un montón de comida. Y al final comimos perdices.
El elenco:
Representantes de Alemania, Suiza, Rusia, China y la Capital Cultural de Latinoamérica.
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